viernes, 3 de abril de 2009

Estoy en crisis! Socorro (mi mono CRONOMÉTRICO ha vuelto a visitarme)

Ya la noté, ya, abrazada a mi cuello como un mono, esta mañana al despertarme. “¡Argh! horror, pero qué es esto! Me la aparté de un manotazo y la oí huir por el pasillo (aún sin saber que era ella). “Debo haberlo soñado”.

Pero al entrar en la cocina a hacerme el café, confirmé que una presencia amenazante me acechaba por la espalda. Me armé con la cucharilla y me giré: “¡Ven aquí valiente, seas lo que seas, que te saco un ojo! Moriré con las zapatillas puestas”.

La oí corriendo por el comedor, y saltando el sofá. (¿Será una paloma contaminada que habrá entrado por la ventana?, ¿un fantasma? Ay dios, Espera! ¿No será una de esas una de esas ratas-mutantes de las alcantarillas que se habrá colado por el váter...?)

-Ajajá! –la acorralé tras el sofá- Ya te tengo! Ahí está...- ¡ah pero si eres tú hombre, ¡mi CRISIS! (¿Cuál de ellas? es que como vienen todas a visitarme religiosamente...) Deja que te vea bien. Ah, ya sé. Eres mi crisis de “Que-pasa-el-tiempo-vieja” (Vaya por dios, ya reaparece el dichosa CRISIS CRONOMÉTRICA. Vaya susto me has dado. Pero si pareces un mono; así que esta vez vienes en forma de mono; sí, eres igual que la mona Chita.

Hala, ven, maja, vamos a desayunar. Siéntate. Trae, mono CRONOMÉTRICO ¿quieres un donut? ¿Un bocadillo? ¡Oye, me salen unos pinchitos de tortilla ole! muá! Buenísimos, ¿Quieres probarlos? Ya veo que no... (¿Qué coméis las crisis en forma de mono CRONOMÉTRICO?). Oye tú, Te veo con cara un poco de plasta... no, no me empieces ya a coger demasiada confianza, no empieces a agarrarte de mi cuello como la última vez que viniste de visita. Menuda cara de tozuda que me pones... ¡Fuera! ¡Lárgate! ¡Será posible! Ni caso. La llevo colgada del cuello todo el día. Este mono es como El Cobrador del Frac. No me desharé de él en unos días, como cada vez que me ataca.
No me queda más remedio que aceptar su visita con resignación. Nos pasamos los días dilemeando. Siempre acabamos haciendo la misma lista: “Pros y contras de hacernos mayores”. (Es tan larga que acabamos hasta con el papel higiénico).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.